En este museo se pueden aprender y ver muchas cosas interesantes, como exposiciones sobre las artes locales y la historia. Además, el edificio en sí es hermoso.
El mejor momento para visitar este museo es en un día laborable, ya que no hay tiempo de espera y no es necesario hacer una reserva.
Una característica especial de este museo es que es genial especialmente cuando llueve. Es un lugar interesante para visitar en días lluviosos.
La entrada es gratuita los martes, lo cual lo convierte en una visita imprescindible cuando se va al país vasco.
Cerca de este museo se puede encontrar una cafetería donde se pueden disfrutar de pequeños snacks y un buen café. Es un ambiente agradable para relajarse después de la visita.