En esta cafetería se sirven deliciosos cupcakes, pequeños desayunos, cafeterías y otros refrescos.
Un punto positivo es que cuentan con tronas y un cambiador, lo cual es muy conveniente para las familias con niños pequeños.
Los clientes destacan el precioso local, la cuidada decoración, la amabilidad de los dueños y, sobre todo, la gran y deliciosa variedad de cupcakes y tartas.
La recomendación especial es pedir el cupcake Sweet Roma, ya que es una delicia.
El ambiente de esta cafetería es acogedor, limpio y tiene un estilo vintage de los años 50. Es un lugar familiar y cercano, perfecto para compartir con buena gente y compañía. Además, cuenta con una terraza exterior y un salón interior con una muy buena decoración.